Volver a Artículos 1400.- Cuatro de cuatro: hoy la hiel del paripé 28/08/2007
El agua, la leche, el vino y la miel. Hoy tocaba la miel pero “me se” impone la hiel, que es decir en gramática heterodoxa y disidente lo que no quiero decir en ortodoxo y ajustado. Y no porque hoy sea el día en que un miura se llevó al otro barrio a Manolete, el novio de Lupe Sino y de media España -la otra media era de no sé bien, tal vez del Condeduque de Olivares-. Me paso a la hiel porque el esplendor en la hierba no atraviesa ya las ramas de la araucaria y las copas verde oscuro de los cipreses barruntan el final del estío. Por otras cosas me paso también a la hiel del paripé:
Se lo digo a los del PP: si quieren llegar al “Gobierno de España” tienen que olvidarse de “España”. Hasta el atentado etarra contra el cuartel de la Guardia Civil de Durango parece un paripé. Un paripé de rojo y grana en traje de entrar a matar. Un paripé donde ZP no se moja de tan mojado que está; nada tanto y en tantos mares que tiene derecho de pernada sobre los oleajes. Y luego está Pepiño, el bocazas de oficio, perdón, quise decir el vocero: la culpa es del PP.
Lo escribo en Finisterre donde ganaron las elecciones por goleada y ya ven: los socialistas y los independentistas gobiernan como vencedores indiscutidos e indiscutibles. Apenas Jesús Pérez Varela abandonó la cartera de Cultura y Deportes y Celso Currás la de Educación y Universidades, comenzó el despelote. Espigas dobladas por el mismo viento, Laura y Ánxela, dos conselleiras independentistas, la Sánchez Piñón y la Bugallo, se lanzaron a la caza de brujas y a construirse el paraíso terrenal, un edencito de paripé. Está a punto de iniciarse la Vuelta Ciclista a España y en los carteles promocionales gallegos ni aparece la palabra España: “Galicia, na orixe do mellor ciclismo, 1-23 septiembre Vigo-Madrid”. La cartera que dirige la Bugallo anuncia estos días una gran campaña turística en inglés, francés y gallego. En este curso escolar aparecen ya las “galestolas”, escuelas infantiles de inmersión total nacionalista, y Anxo Quintana propone la obligatoriedad de que los alumnos de los centros escolares de Galicia canten cada día el caralsol, perdón, quise decir el himno gallego: “¿Qué din os rumorosos na costa verdecente ao raio transparente do prácido luar?” -el “Hino galego”, aquel melodrama musical que compuso Pascual Veiga con la letra errática del poema Os Pinos, de Eduardo Pondal: la si do do…-. Mientras, el presidente Touriño es un paripé. Con la sonrisa de oreja a oreja, parece un monigote dispuesto a pasar al estrellato en cualquier momento. Es un socialista de los que aprendieron la lección y se olvidaron ya de la palabra maldita. El PSG tiene 12 diputados menos que los populares y los del Bloque cayeron fulminados: 24 diputados menos que el PP. Igual que en la alcaldía de Vigo, la de Santiago, la de Orense, la de Pontevedra…
Hasta la campaña gubernamental sobre “España” y “Gobierno de España” parece un paripé. Además de un cazavotos a la desesperada, es un caballo de Troya en la línea de flotación de este buque en vías de desguace. Un paripé furibundo como de broma rabiosa. “Me se” impone la hiel, que es como rezar un padrenuestro al José Tomás ensangrentado de los carteles.
Al final del verano, la miel ha desplazado a la hiel pero, como siempre, los guaperas en edad de merecer y algunos cachas de calendario se dan la mano en las despedidas. Juegan a ser Darek, el novio polaco de Ana Obregón. Hace sesenta años, tal día que hoy mató Islero a un tal Rodríguez, el novio de Lupe Sino, amor desenfrenado a primera vista, y yo, en la hiel del paripé.
